Rusia 2018 está lejos

Bolivia perdió anoche en Miami ante su par de Ecuador (4-0), en el arranque de un nuevo proceso que apunta a ganar una de las plazas para el próximo Mundial de Rusia 2018. Dos goles en el primer tiempo y otros dos en el segundo, que pudieron ser más, resumen la pobre actuación del seleccionado nacional, sin un norte ni sur futbolístico, ante un rival altamente superior, que jugó a placer y que, a diferencia de nuestra selección, dio muestras de ir por el camino correcto.

Fiel al estilo y a la tradición de los equipos bolivianos y de la selección en torneos de carácter internacional, anoche en Miami, el combinado que dirige el español Xabier Azkargorta tomó un gol tempranero y lo que vino después fue la consecuencia de una desesperación lógica, en un intento estéril por equilibrar las cosas pero sin un objetivo claro.

El 1-0, anotado a los 8 minutos por Cristian Noboa, llegó por una descoordinación en la marcación sobre Renato Ibarra. El ecuatoriano, aprovechando la ausencia de Marvin Bejarano por el carril izquierdo, no tuvo problemas para desbordar por ese lado, ante la floja marca de Alejandro Meleán, sirviendo el balón para que Noboa simplemente la colocara, pese a que el arquero Rómel Quiñónez alcanzó a tocar el balón pero sin fuerza.

El 2-0 fue obra de Juan Cazares, a los 33 minutos, tras una pésima marca de Raúl Castro. La pelota hizo una comba antes de meterse en el arco boliviano. Hasta ahí Ecuador era más, superior por donde se lo mirara. Bolivia había hecho poco y nada para contrarrestar esa avalancha ofensiva que pudo ocasionar una vergüenza mayúscula.

En el segundo tiempo Enner Valencia anotó el 3-0, a los 64 minutos, gracias a un pase al vacío que ni Ronald Raldes ni Quiñónez llegaron a tiempo, y el 4-0 llegó a través de Sornoza, otro jugador de la nueva camada del fútbol ecuatoriano y al que Sixto Vizuete, el DT interino, le dio su voto de confianza. Con el triunfo prácticamente sellado no había más que hacer. Bolivia había ofrecido muchísimas ventajas defensivas y Ecuador no perdonó a la hora de marcar diferencia.

Muy a la defensiva

La selección de Xabier Azkargorta mostró, una vez más, que está hecha solo para apostar sus fichas a un planteamiento defensivo, tacaño, y a esperar algún milagro en la ofensiva, que sin la polenta de Marcelo Martins es mucho pedir. La única jugada de real peligro la desperdició José Luis Chávez, a los 50 minutos. El boliviano pisó al área grande rival y remató de zurda, desviado, para tranquilidad del arquero Máximo Banguera, que fue un espectador más.

Ecuador se dio el lujo anoche de poner en cancha a mucha gente joven, entre ellos algunos sub 20, y su forma de jugar no varió, a diferencia de Bolivia, que no pudo encontrar el rumbo y sus pocas intenciones ofensivas se fueron perdiendo en el camino; sin ideas, con toquecitos improductivos en el medio que no dañan y con una sucesión de fallas y desconcentraciones
defensivas que siguen siendo la carta negativa de presentación de una débil Bolivia. En una, el arquero Quiñónez quiso salir jugando y por poco regaló un gol.

En su descargo el técnico podrá argumentar que está dando chance a nuevos jugadores, pero tampoco suena convincente. Salvo algunos que no fueron llamados para estos dos partidos en
Estados Unidos por diferentes motivos, como Luis Gutiérrez, Juan Carlos Arce y Marcelo Martins, Azkargorta disponía de lo mejor que tiene el fútbol boliviano en la actualidad.

El inicio de un nuevo ciclo, con miras al Mundial de Rusia 2018, no podía ser peor. El 4-0 de anoche desnudó las deficiencias de una selección que se quedó estancada y explica el porqué es la última de Sudamérica.

Pases cortos

Ecuador nos tiene de hijos desde hace 17 años en partidos amistosos y oficiales

En un sector del estadio, se vio a hinchas de Ecuador y Bolivia. Cada grupo con sus respectivas banderas.

El joven volante Juan Cazares debutó anoche con gol en la selección ecuatoriana. Tiene 22 años y juega en Banfield de Argentina.

Fue el primer amistoso de los cuatro programados que dirigirá Sixto Vizuete como entrenador interino.

Fidel Martínez jugó 7 minutos porque un golpe no le permitió continuar en la cancha. Martínez fue remplazado por Joao Rojas, en Ecuador.

Ecuador lleva 17 años invicto en sus partidos frente a Bolivia. El último triunfo boliviano fue en 1997.

Por norma FIFA para partidos amistosos se pueden realizar seis cambios, incluyendo un arquero.